Por Geraldine Guggisberg Florez
En una emotiva ceremonia se recordó a las víctimas de prisión, tortura y desaparecimiento que sucumbieron hace treinta y cinco años el 11 de septiembre. La romería se celebró en el Cementerio Parroquial de Maipú y contó con la asistencia de representantes de distintos sectores de la izquierda política comunal.
Ante más de una cincuentena de personas se recordó en un acto conmemorativo a las víctimas de la Dictadura, especialmente al ex presidente Salvador Allende y a los maipucinos simpatizantes de la Unidad Popular, todos caídos el 11 de septiembre de 1973.
La ceremonia - convocada por la Organización de Derechos Humanos de Maipú- contó con la participación de importantes figuras políticas maipucinas, como candidatos a concejales y presidentes comunales de los distintos partidos de la Concertación y de Izquierda, además de dirigentes sociales y sindicales.
Entre las palabras dirigidas al público presente, muy emotivas fueron las pronunciadas por la madre de un detenido desaparecido, quien señaló que “durante treinta y cinco años llevo una lucha, de la cual no he bajado las manos (…) Éste es el peor duelo: nos mataron nuestro presidente y nuestra democracia”, exclamó a los presentes.
“Estamos aquí para que no se imponga la impunidad, para que prevalezcan los derechos humanos” exclamó un dirigente sindical, “hoy es un día que no podemos dejar pasa. Es cierto que debemos perdonar, pero es un perdón sin olvido” señaló muy conmovido Luis Valverde, candidato a concejal por el Partido Socialista.
Palabras emotivas tuvo también en esta ocasión, Patricio Chandía, que recordó principalmente a los trabajadores y su organización, durante los inicios de los años 70.
Finalizado el acto conmemorativo, los asistentes se dirigieron al centro histórico de Maipú -al sector del Pimiento- en donde se realizó una velatón en memoria de las víctimas de la Dictadura. El homenaje concluyó en la sede de la CUT de Maipú, en donde se bebió un “vino de honor” en nombre de quienes sucumbieron bajo la represión.
Memoria viva
“Realmente es conmovedor el encontrarme aquí, en lo que estamos recordando… En esa época todos nosotros éramos activos participantes en lo que era –hasta ese momento- el gobierno más progresista que el país ha tenido. Me encanta ver ahora compañeros radicales, socialistas, comunistas, independientes que fueron, incluso, la base fundamental política y social del gobierno que encabezó el compañero Salvador Allende. Nosotros debemos tener mucha conciencia acerca de que éste es un lugar sagrado, no solamente para los que aquí yacen, sino sagrado también para nosotros, porque cayeron no por una cuestión natural: ellos cayeron defendiendo los principios y derechos del pueblo trabajador. Y por eso nosotros no debemos conformarnos tan sólo con asistir de vez en cuando a un evento de este tipo. Debemos tener muy presente que debemos educar a las generaciones venideras acerca de cuáles son sus reales derechos, que no son aquéllos que son presentados actualmente por los medios de comunicación y que los hace desorientarse realmente, y en algunos casos –incluso- contraponerse a los destinos reales y benefactores de la familia. Queremos dejar muy presente -la gente de la tercera edad- de que nosotros, a pesar de que muchas personas piensan que por la edad nos debemos retirar de la actividad política, nosotros hacemos todo lo contrario. En cada actitud, en cada acción, en cada forma que podamos descubrir adoptamos una acción política en relación a lo que se vive en este momento en Chile. Porque tenemos presente que no solamente nosotros hemos sufrido, hay gente que lo ha sufrido más y mucha gente que fue sacrificada. Mi reconocimiento a los compañeros que cayeron luchando, no solamente el día once de septiembre, sino también a los que siguieron cayendo, porque el compañero Allende fue muy claro cuando lo dijo “aquellos que serán perseguidos y vejados” como nosotros. Yo fui vejado, yo fui prisionero en la Isla Quiriquina, yo, como periodista y trabajador de los diarios populares Puro Chile y El Siglo, fuimos vejados una y otra vez y los seguimos siendo. Y ésa es la razón por la cual en cada lugar, en cada momento que sea propicio, estaré personalmente o en representación para decir que nosotros necesitamos justicia, que los que no lo hicieron en vano. Y para ello seguiremos luchando”. Jorge Pacheco, ex periodista El Siglo y Puro Chile.
Fuente: diario electrónico la batalla